El Chile que soñamos

EL CHILE QUE SOÑAMOS

Renato Sepúlveda 3°A

Chile en los últimos años ha pasado por grandes disturbios y mareas que poco a poco han afectado la estabilidad social del país, la mayoría provocados por una represalia ante eventos del oscuro pasado, lo que llevó a muchas personas a generarse ideas distintas de lo que era para ellos su país. Muchos de los chilenos se dividieron en alianzas o partidos distintos , lo que a su vez genero más disputas sobre cómo debería sobrellevarse el país en todo su esplendor.

Con todo esto dicho sin contar la pandemia actual en la que todo el mundo se encuentra,

Una de las dudas quizás más reiteradas y cuestionables que se nos plantea a nosotros los jóvenes chilenos es ¿Cómo sería nuestro chile ideal o soñado?, pues en sí parece que para muchos esta duda es fácil y sencilla de responder, pero en retrospectiva no lo es tanto, muchos podrían decir que simplemente le demos libertad a los ciudadanos a todo, cosa que en un principio parecería perfecto, pero a largo plazo nos perjudicaría mucho más y en cambio cerrar al país en un estricto dictado de reglas es también empeorar la balanza para nosotros.

En sí estas son ideas que rondan por todos los rincones o recovecos del país, ideas que en el fondo parecen tener una mirada a un futuro más pacífico pero que sus métodos son no solo distintos sino que también algo que escapa de nuestro control a la larga.

Debo decir que en todo este tiempo que he aprendido sobre la historia de mi país, he sentido que en el fondo ni nosotros como ciudadanos ni el gobierno que nos rige han puesto un verdadero esfuerzo por salir adelante, quiero decir, esfuerzos que muestren un interés general por país y la sociedad que lo une, no solo para zanjarse de inconvenientes u obtener beneficios que al final solo benefician a uno o unos cuantos, que en el fondo no lo necesitan incluso.

Para mí un Chile soñado no solo es aquel que tiene parajes bellos, una infraestructura llamativa o el país con el mejor exportación en un producto x, sino un Chile que demuestre solidaridad y respeto entre todos los ciudadanos por igual, empezando por quizás lo más importante en ciertos aspectos, la educación.

Todos en su mayoría somos conscientes del problema que tenemos con la educación nacional, aunque existe la educación en todo el país, demuestra tener defectos muy notorios que reducen la efectividad de los estudiantes, las posibilidades como también la manera incluso de medirlos muestran cierto interés en el número que obtengamos en una prueba en vez de quizás saber si quizás entendimos la materia o si nos hemos acomodado a este sistema educacional.

Otro tema que también puede dar un Chile soñado es la salud. El área de la salud en sí no es el problema central, sino sus establecimientos que se dispersan a lo largo y ancho, estos simplemente no dan la eficiencia necesaria para las personas, como también no se prioriza los que son de suma atención médica, el hecho es que hoy en día, el recibir una atención medica de calidad y el sentirse seguro de que podrás tener acceso a ella es algo que se debate mucho y que está empezando a quedar solo en la mente.

Por parte nuestra como ciudadanos, la participación se ha vuelta un tema actual. Si nos fijamos en casi una década la cantidad de participantes ha disminuido, algo que puede comprenderse hasta cierto punto, sin embargo esto simboliza un problema cuando se trate de tomar decisiones importantes que si cambien el flujo del país, como parte que da vida al país de forma social es importante tomar conciencia de esto, así como también las dignas remuneraciones o salarios que merecen nuestros trabajadores. En comparación a las horas de trabajo y la poca estabilidad el salario simplemente se vuelve miserable y muy escaso para familias grandes o de bajo nivel económico.

La seguridad es un punto que quizás en un tiempo fue pasado de largo pero que actualmente toma también peso en este siglo, ahora ni siquiera en nuestros hogares podemos sentirnos seguros o a salvo de peligros, básicamente la mayor parte de noticias son de asaltos, robos a tiendas, bancos o casas, portonasos, etc. que pueden reflejar perfectamente la poca seguridad y a su vez la poca justicia que se impone, aun cuando un delincuente comete actos innombrables contra inocentes, la ley nada más da un tiempo que no rebasa si quiera lo justo para cada delito, y en cuanto acaba esa persona vuelve a las calles o hogares y siendo conscientes la mayoría no vuelve para incorporase a los demás en sociedad inclusive empeoran y son más destructivos, no se está pidiendo que se hagan ejecuciones a diestra y siniestra sino que se haga lo que la palabra trata de imponer, lo justo, lo justo por cada error o acto delictual.

Aunque sé que hay muchas más cosas que son importantes de resaltar , estas son algunos de los aspectos que del Chile que sueño y en el que me gustaría vivir.

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